Estamos en, casi, ninguna parte... (A. Dolina)











jueves, 22 de diciembre de 2011

Persistencias



Siempre me sorprende
la constancia desigual de algunas cosas
esas formas talladas en la nube,
por ejemplo,
ese brote de manos que migran al destierro.
Ese borde roto en el tiempo del después
o tu recuerdo que no es más
que un hueco frío en el que me olvidé de mí.

La silueta de aquel grito
que se me escurrió en la garganta
antes, mucho,
de que atinaras siquiera a escucharlo.

O la persistencia, si se quiere,
del silencio:
Un rumor oscuro que me llegó
desde el fondo de tu mirada
cuando ya no pude verme.

Y mientras persiste la inconstancia

de ese juego entre las nubes

recuerdo
algo indefinible que brota
en la miel amarga del desengaño
y se me atraganta en la piel del sueño
(un terreno donde aprendemos, sin saber
el oficio de la muerte:
la otra forma de decir adiós).





5 comentarios:

miralunas dijo...

la persistente inconstancia rebota siempre en la constante persistencia del alma, si.

qué bien escribes, María.
un pleacer re andar tus letras y las elegidas de otros.

buena vida!

Daniel Os dijo...

Me quedo con aquello de la miel amarga del desengaño como terreno donde aprendemos el oficio de la muerte, no por la bella construcción sino por el aprendizaje.

Celebro la lucidez, pulcritud y arte con que que se desarrollan los conceptos… valió la pena esperar.

Un beso,
D.

María dijo...

Son indeciblemente generosos...¡Y persistentes!
Les vaya dedicado porque estuvieron presentes entre los trámites de escribir y publicar.
Gracias.

Alejandro Pinto dijo...

bellos textos y bellas fotos!!, un abrazo

Pablo dijo...

Después de leer el cielo en tu mirada, de cotejar las nubes del olvido, de olvidarme de mi en una explada, que puede llevar por nombre "nada", después de recorrerte con oídos, con ojos, con respiros; encuentro en el silencio casi todo, exepto tu sonrisa, tu inofensiva brisa, la luz de tus palabras, tus gestos que convidan a despertar al alba, y encontrarse amarrado a tus espaldas, sin pálidas ni prisa.